vendredi, janvier 16, 2015

Despierta y grita

Confiesa, esta es una trampa. Grita, te haremos sufrir hasta que delates al impostor. Pensaste que era fácil huir de mi trampa, debes saber, y que quede entre tú y yo, que siempre supe que ibas a fallar en tú plan maestro. Te pasaste de la línea que dividía nuestros mundos, lo forma e informal, lo bueno y lo malo, lo real e irreal. Despertaste, y de pronto, te percataste que todo aquello que valorizabas, hoy es simplemente basura. Me diste varias pistas, una de ellas fue la mancha de sangre en el piso de mármol del mausoleo que visitabas, pensando en tú última morada. Viste que fue fácil dar con tu error, a pesar de que antes que despertaras era todo perfecto. Y ahora ni tus gritos te salvaran de morir en mi mundo, aunque cuando vuelvas a dormir, no lo sé.